Il Divo...di Juárez

¡Gracias por todo, leyenda!

La muerte de un personaje de este tamaño -no literalmente- siempre provoca reacciones de todo tipo. Homenajes, coberturas que rayan hasta en lo absurdo, y todos nos trepamos al tren de la succión para rendir tributo al caído.

Si, JuanGa fue un ícono nacional. A veces menospreciado, a veces desdeñado por temas que todos conocemos. Como no es tema hablar de lo que era o no era - y porque además la banda anda algo sensible- simplemente dediquémonos a hablar de su enorme legado musical, y un breve pero sustancioso Top 5.


5. Pero qué necesidad

Siendo un imberbe adolescente, esta rola según recuerdo salió en el '96. La verdad me latió el mensaje bastante relajado, simplemente porque a veces parece ser que nos complicamos de más...



4. ¿Por qué me haces llorar?

La verdad, he de decir que esta la descubrí por accidente. Buscando otra canción del Divo en Napster -o alguno de esos servicios gratuitos de descarga de canciones...y virus- me encontré con esta rola, y de inmediato la adopté como parte del soundtrack. A la fecha la traigo en el teléfono (¿Qué? No me vean tan feo) y a la menor provocación la ponemos...si es con alcohol de por medio, mejor.




3. Hasta que te conocí

Esta he de aceptar que me acompañó en varia peda durante el principio del milenio. Sobre todo esta versión, incluída en el Popurri de 25 minutos, nos acompañaba cada fin de semana con una serie de personajes que disfrutaban en demasía de esta canción. Habría quedado más arriba en mi preferencia, pero creo que las otras no tienen pierde




2. Te Sigo Amando

Esta la dediqué (obvio, después de servirme como pomo y medio). Además, es favorita de la jefa y eso le añade puntos. Esa frase de "Perdóname mi amor por todo el tiempo que te amé, te hice daño" pega y con tubo -como si te hubieras servido pomo y medio-.

Esta versión en vivo no tiene desperdicio...



1. Abrázame Muy Fuerte

Mi favorita de todos los tiempos. Toda la letra puedo decir que me puede mucho, porque me recuerda a gente que quiero -y quise- mucho, desde familiares y amigos hasta personas que ya sabemos que no andan presentes en mi vida.

(He de decir que además de esta versión, la que canta mi muchacho Marc Anthony me pone la piel chinita)

Enjoy.



Menciones honoríficas:

- Así Fue

- Querida (dimecuandotu, dimecuandotú)

- Yo te recuerdo

- Te lo pido por favor

Y ustedes, ¿con qué rola recordarán a JuanGa?

Hasta Luego

Gracias por todo...

Sirva esta entrada para rendir tributo a un hombre al cual respeto, admiro, y hoy más que nunca, extraño.

Roberto Camacho Ortega fue un hombre de bien. No tuvo riquezas, tuvo que batallar para sacar adelante a su numerosa familia. Vivió gran parte de su vida en Mesillas, Concordia, un pequeño pueblo al sur de Mazatlán, en el estado de Sinaloa.

Puedo decir que tuve la fortuna de convivir con el durante los 35 años que tengo de vida. En algunos años la convivencia se incrementaba, pues los viajes eran frecuentes al menos una o dos veces al año. En los últimos años no nos vimos tanto, pero siempre había una llamada, una felicitación por su cumpleaños y/o Día del Padre. Me daba alegría escucharlo cada 26 de noviembre, ya que ambos marcaban para felicitarme -esa felicitación era la onda-.

No era un hombre de muchas palabras, pero su voz se hacía sentir cuando las decía. Su voz ronca, su sonrisa sincera, las pláticas de música (tocaba la guitarra) y una conexión especial con una canción que me gusta mucho son varios de los recuerdos que me llevo de el.

Me pesa mucho no haberlo visto en este último año, a pesar de tener ya planeado un viaje al pueblo. No pudo ser, pero su partida me da un motivo para buscar un reto personal.

No quise escribir esta despedida a los pocos días de que se fuera, pues esto habría sido un total sinsentido. No entro en más detalles por respeto a mi familia (a los que llevo cerca), y simplemente agradezco la oportunidad de haberlo conocido, y con conocerlo me refiero a haber pasado tiempo con el, escuchado sus historias, reído con el.

Gracias por todo, abuelo. Te vas en paz, y no dudes nunca cuanto te quisimos.

PD. Va por ti.