lunes, 29 de diciembre de 2014

La canción del final, Edición 2014

Porque las tradiciones de este blog se deben de mantener por encima de cualquier cruda, viaje o situación que impida escribir, hoy me permito darle cauce a la misma.

Esta banda es lo que uno llamaría "One Hit Wonder". Ayudado por cierta película donde salía, esta canción alcanzó notoriedad al salir en Spider Man 2 (la mejor de esas movies, a mi parecer), y después de varios días analizando cuando ponerla -más bien, cuando hubo chance-, hoy la dejo para ustedes con todo y letra.

Después de muchos años, hoy me voy en paz con todo. Me voy fortalecido y sin deberle nada a nadie. Me reivindiqué después de años de ser un auténtico hijo de la chingada, y eso vale más que cualquier otra cosa que pueda haber hecho este año. Ojalá esta felicidad me dure muchos años, pues ver hacia adelante sin remordimientos es algo que nunca había experimentado.

Nos vemos en enero. Les deseo que tengan un glorioso 2015.

Vindicated

Hope dangles on a string like slow spinning redemption
Winding in and winding out, the shine of it has caught my eye
And roped me in, so mesmerizing and so hypnotizing
I am captivated, I am

Vindicated, I am selfish, I am wrong, I am right
I swear I'm right, swear I knew it all along
And I am flawed but I am cleaning up so well
I am seeing in me now the things you swore, you saw yourself

So clear like the diamond in your ring, cut to mirror your intention
Over sized and overwhelmed, the shine of which has caught my eye
And rendered me so isolated and so motivated
I am certain now that I am

Vindicated, I am selfish, I am wrong, I am right
I swear I'm right, swear I knew it all along
And I am flawed but I am cleaning up so well
I am seeing in me now the things you swore, you saw yourself

So turn up the corners of your lips
Part them and feel my finger tips
Trace the moment, fall forever
Defense is paper thin
Just one touch and I'll be in
Too deep now to ever swim against the current

So let me slip away, so let me slip away
So let me slip away, so let me slip against the current
So let me slip away, so let me slip away
So let me slip away, so let me slip away

Vindicated, I am selfish, I am wrong, I am right
I swear I'm right, swear I knew it all along
And I am flawed, but I am cleaning up so well
I am seeing in me now the things you swore, you saw yourself

Slight hope dangles on a string
Like slow spinning redemption

El Resto



Ha llegado ese bonito momento del año en que hay que decirle adiós. Como en 2014 me la pasé dando las gracias por todo, solo me voy a detener un momento para pedirles a todos que sigan apoyando esto. Durante este gran año no pude escribir como hubiera deseado, muchas ocupaciones me lo impidieron, pero prometo regresar con más fuerza a partir del 3 de enero, que es cuando acaba mi break vacacional.

Gracias por tanto, por las alegrías y las tristezas, por las pedas y las pláticas de madrugada. Por las idas al estadio y las sonrisas inesperadas. Por esos ratos en los que aún solo en el camino mientras corría, estaban presentes todos y cada uno de los que tengo el lujo de tener como amigos. Por los que llegaron, los que se fueron y también por los que estuvieron de paso. Nunca se me van a olvidar.

Perdón por tan poco. Perdón por estar ausente, por perder la paciencia, por no hacer lo que era requerido. Perdón por las veces que una llamada no era suficiente, y por no ser lo que algunos querían que fuera. Perdón por no conformarme, y más aún, perdón por hacerles creer que lo intentaría. Perdón por las palabras ebrio, algunas sin sentido y otras sin razón de ser. Mil veces perdón, y más veces aún si es necesario. Perdón a esos que dejé en el camino, lamento no haber estado a la altura de sus circunstancias, así como ustedes no estuvieron a la altura de las mías.

Me voy en paz, y les prometo que el 2015 será un año mejor que este. Todo es cuestión de actitud...y un par de huevos.

viernes, 26 de diciembre de 2014

El Soundtrack del 2014

Como todo fin de año, acá va un recuento de las canciones que fueron relevantes este año. Podrán tener tres meses de haber salido al mercado o veinte años, pero en la coyuntura de este brutalmente sabroso 2014, tuvieron mucho que ver para ser recordadas en este sincero y tropicoso espacio. Esta vez habrá un poco de todo, porque el año trajo varias sensaciones que no podrían expresarse con un solo ritmo.

5. Queen - Under Pressure

La banda no necesita introducción, y la canción básicamente aparece en este conteo por lo que significó regresar a trabajar en dos lugares distintos. Nada más maravilloso que la satisfacción del deber cumplido, sobre todo en la empresa a la que me debo y que será mi patrimonio en años por venir. Falta mucho por hacer, pero estas pruebas de presión son las que uno necesita para seguir creciendo.

La Frase: "It's the terror of knowing what this world is about, watching some good friends screaming 'let me out!' Pray tomorrow get me higher..."


4. One Republic - Counting Stars

En realidad, esta canción tomó relevancia a partir de que empecé a seguir con más detenimiento una estación de radio, particularmente un programa que escucho por las mañanas. El momento en que se apareció sirvió de combustible para el final de año, justo cuando más lo necesitaba. Es el himno del próximo año, y vamos por cosas más altas.

La Frase: Sencillo: "Everything that kills me makes me feel alive"



3. John Lennon - Beautiful Boy


Después de que en febrero naciera mi segundo sobrino, quise rendirle un pequeño pero sentido homenaje al crío. No hay mejor sensación que verlo crecer, reír -que vaya que lo hace- y disfrutar su presencia en la casa o cada vez que lo veo. Lleva el dignísimo nombre de su bisabuelo, y espero de verdad que nunca reniegue de su tío, porque la verdad MATO porque esté bien. My nigga tenía que estar representado aquí, y quien mejor que el maestro Lennon para musicalizar su llegada.

La Frase: "Before you cross the street, take my hand. Life is what happens to you while you're busy making other plans." Que se cuide el mundo, porque una pequeña bala ha llegado.


2. Oasis - Stand by Me

Corria 1998 cuando salió esta canción. Sin referencias personales, esta canción siempre quise cantarla con la banda pero nunca se me hizo. Sin duda la relevancia que adquirió este año se resume a un hecho: el Medio Maratón. Con esta canción como fondo crucé la meta, y a decir verdar, no podría el destino haber puesto mejor rola para ese preciso instante. 

La Frase: "Maybe you and I will not believe in the things we find behind the door. So what's the matter with you? Sing me something new..." No estoy seguro de que esa era la estrofa exacta, pero esa parte me raya.



1. Marc Anthony - Vivir Mi Vida

No tengo palabras para describir lo que esta canción significó durante este año. Me permitió quitar reglas, vivir cosas inesperadas, levantarme de situaciones adversas. Fue fuente de inspiración en cada entrenamiento y causante de muy buenas pedas. Vaya, fue mi credo desde el primer minuto de 2014 (aquí la prueba), y haberlo llevado a cabo sin ningún tipo de remordimiento me hace muy feliz. 

La Frase: Lo intenté, pero toda la letra tiene algo que en verdad apliqué este año. Elegir solo una parte sería cortar algo que puede significar más.

lunes, 15 de diciembre de 2014

DOCE

Doce veces, aunque les sangre la boca...


América es un equipo distinto, para la mayoría no es posible entender su grandeza. Muchos la confunden con arrogancia, y los "happy few" que damos todo por verlo campeón disfrutamos en demasía que se hable de ellos, bien o mal. A mi me divierte mucho ver como se enojan, me divierten sus teorías de la conspiración. Me encanta irle al malo de la película, al son of a bitch. Me queda claro que no todos lo pueden disfrutar, porque no todos entienden de que va este equipo. Vaya, si un técnico acaba de conseguir un título y se quedó sin trabajo. Las formas importan y no es broma.

Ahora no hubo goles del arquero a segundos del final. Mucho menos penales dramáticos cobrados por aquel que fuera vituperado por varios -myself included-. La historia de este título no fue ni por mucho igual de épica que la anterior, pero si fue ampliamente gozada por este servidor, y en esta oportunidad no hubo necesidad de salirse del estadio y regresar corriendo por mi falta de fe. Hoy que el equipo dueño de mis quincenas es campeón, se convierte en el más ganador de México y nos deja nuevamente en boca de todos, por lo ocurrido dentro y fuera de la cancha.

He de decir que esta liguilla estuvo bastante charra. En conjunto con el torneo regular, no fue precisamente el mejor espectáculo sobre la faz de la tierra, pero como dice un compa, le dio de comer al anti americanismo, ese que se vanagloria cuando el equipo anda mal, que inventa conspiraciones para desdeñar sus títulos, y que hoy solo puede estar calladito y reconocer que no hubo alguien mejor que los de Coapa. Hoy todos esos que se llenan la boquita hablando sandeces cada semana no tienen nada que decir, porque corren el riesgo de sonar más ardidos que nunca.

¿Su argumento más recurrido? El arbitraje. Ninguna decisión fue directo al marcador, pero no por eso sobra la gente que habla de una conspiración. ¿Es neta? Por citar un ejemplo, la primer expulsión del partido fue muy parecida a otra que decretó el mismo árbitro en la final que el Ave le ganó al Azul.  Un jugador que conducía a toda velocidad el esférico por el centro es jaloneado, cuando solo le quedaba un jugador por vencer. Roja directa y a la shit en ambos casos. Como la primera fue en contra del América estuvo bien marcada, pero como la segunda fue a favor del hoy Campeón, entonces todo es culpa de Televisa y regresamos a los lugares comunes que le encantan a los descerebrados. Hoy ni siquiera ese barato argumento sirve para demeritar que el club de mis amores es el primero en alcanzar doce títulos, y eso, la verdad, no tiene precio.

Uno de mis ídolos de la adolescencia fue Antonio Mohamed. El regordete creativo de Toros Neza me parecía un jugador eléctrico, uno de esos que hacía se te pusieran los pelos de punta. Era desgarbado, panzón, atípico, con el cabello pintado de semáforo. Era un deleite verlo jugar, y hoy después de muchos años, puedo admitir que ante la sequía de trofeos de mi Ame estuve a nada de cambiar de equipo. Cuando el dejó a ese club y se acabó la magia en la cancha, se me quitaron las ganas de irle al conjunto de Nezayorkóyotl. Ayer que se confirmó su partida del club de mis amores, se me quitaron las ganas de volverlo a ver, y no porque sea malagradecido, sino porque sus formas de declarar me parecen un poco de niño llorón. Esperaría más de alguien que perdió a su hijo en un accidente durante un Mundial, vaya, que tuviera más huevos y no llorara en todos los canales porque no le quisieron renovar contrato.  Se le agradecerá el título, como a otros más, pero hasta ahí.

De lo acontecido en el Azteca ayer simplemente queda rescatar algunas situaciones. El apoyo de la gente, que no cesó durante los 90 minutos -más los otros 40 que estuvimos ahí tomando video y selfies-,  queda rescatar el gol de Michael Arroyo, que todo el año las intentó así y las mandaba a la fila 70 de la tribuna. Queda rescatar también el gol de Pablito Aguilar, con una curvatura perfecta tras un centro de mi muchacho Rubens. No puedo olvidar el tanto que aseguraba el título, obra de Oribe Peralta, que ha empezado a sufrir lo que muchos más cuando se pone la playera amarilla. Ya lo odian y lo tachan de mamerto, cuando no han tenido la fortuna de tratarlo en persona. Eso y la convivencia con ilustres desconocidos y con mis héroes particulares. Queda la sonrisa de mi padre, que ha visto los doce campeonatos del equipo. Queda el saberte el mejor, diga lo que diga el resto. Así culmina una noche que nos puso en lo más alto, de donde nunca debimos haber bajado.

Por cierto...no había reparado en que he dicho que este ha sido uno de los años más maravillosos de mi breve existencia. Que mejor manera de cerrarlo con una alegría así. Enough said.