Libertad de Expresión

Aclaremos posturas de una vez: Nunca he sido fan de Carmen Aristegui. Su interpretación de las noticias me parece buena a secas, mordaz con algunos y complaciente con otros. No me parece que sea dueña de la verdad absoluta y tampoco creo que sea la mártir que nos han querido vender las últimas 24 hrs. Tampoco creo que Felipe Calderón sea un santo y que defienda a muerte los derechos de los comunicadores en México(basta con saber las cifras de periodistas muertos en este sexenio)ni que sea el Presidente que todo México esperaba(sobre todo los que votamos por el). Hoy en particular voy a hablar de la decisión tomada OFICIALMENTE por la empresa para la que C.A. trabajaba, y que conozco de primera mano: MVS.

Hubo un rato en que MVS era el rey de la televisión de paga en México. La década de los 80 fue un lujo para ellos, pues vendían al por mayor sistemas de cable y no era tan complicado tenerlos(es mas, se vendían con un sencillo manual tipo "hágalo usted mismo" y en cualquier supermercado). En ese entonces surgió también la opción de radio, encabezada por Pedro Ferriz de Con, Javier Solórzano y Carmen Aristegui, que desde ese entonces se dio a conocer por su estilo de manejar las noticias. Después entraron otros competidores y decidieron dar mucho mayor empuje a la parte de radio,dejando la producción de contenidos para televisión un tanto retrasada en comparación con otras empresas.

Años después y como hemos documentado ya hasta la saciedad en este elegante espacio, tuve el honor de pertenecer a la fracción televisiva de la empresa, en la cual al momento de firmar contrato, se me hizo firmar un código de ética en el cuál me comprometía a no difundir noticias que no fueran confirmadas por fuentes autorizadas. Ese acuerdo SI existe, no se lo están sacando de la manga,y me fue aplicado cuando tuve la gran y maravillosa idea de tirarle mierda al "Gober Precioso" por no proporcionar la suficiente seguridad a un evento ciclista y por literalmente, no pelar el paso del evento por su ciudad, sin mandar siquiera alguno de sus chalanes a entregar los reconocimientos. A mi regreso de cubrir el evento se me pidió no hacer nuevamente ese tipo de comentarios, porque habían llegado quejas del Gobierno estatal sobre los comentarios hechos. Esa fue la primera y única vez que me llamaron la atención, porque preferí atenerme a dar la noticia y no emitir juicios que no me llevaban a ningún lado.

En el caso de Aristegui, creo que esas llamadas de atención habrán sido bastantes, porque independientemente de rating que pudiera tener(además conociendo a LA productora de su noticiero) hay que respetar los códigos que ella misma ha pisoteado en las varias empresas de las que ha sido despedida. En lo que respecta a MVS me consta que no hacen las cosas de forma muy correcta, pero sus normas si son muy sencillas de entender. Creo que la señora acabó creyéndose eso de que era intocable y vertió comentarios fundamentados en algo que no está confirmado, que son rumores, y que la neta ninguno de nosotros estamos en posición de defender ni de confirmar. El hecho de que sea ella le da mucho vuelo al asunto y es donde todos los inconformes con el sistema se sienten defraudados y empiezan a tirar calabaza. ¿Qué tal si hubiera sido por ejemplo, Loret de Mola el que hace esos cuestionamientos y lo corren? Obvio no pasa nada porque el se lo merece, porque es cachorro del sistema y muerde la mano que le da de comer...pero como en este caso, es una periodista abiertamente de izquierda, la que tiene todas las primicias del peje y sus secuaces, entonces hay que martirizarla y hacer marchas para que la reinstalen.

Independientemente de todo esto que les he mencionado, el faltar a principios básicos del periodismo citando fuentes no oficiales es algo que una persona de la innegable inteligencia y trayectoria de la señora debería saber, y el hecho de no pronunciarse al respecto al menos a mi me indica que sabe en que la regó. El resto, como el alcoholismo de Calderón, son especulaciones.

Vivimos en una sociedad que privilegia el rumor a la verdad, en la que decir "lo vi en Twitter" ha pasado sus límites, y creo que con este ejemplo al menos deberían escarmentar algunos que gritan que su libertad de expresión fue pisoteada, cuando han matado a Chabelo y a Chespirito un chingo de veces.