domingo, 4 de marzo de 2012

El regreso con un viejo amor

Desde hace unos 14 años hemos tenido una cercana relación. Arraigado en mi prácticamente desde nacido, estar juntos siempre ha representado para mí una enorme tranquilidad, alegrías, tristezas.  Fue en 1999 cuando decidí estar más cerca . Vivir sus triunfos, sus derrotas, estar ahí cuando a nadie más le importaba. A veces se me unía mi mejor amigo, en otras ocasiones mi familia, y en muchas otras no estudiaba para examenes por estar siempre ahí, siempre que me necesitara.

En 2002, cuando mis prioridades cambiaron, me dio una enorme alegría. En 2003, abandoné a su suerte por única ocasión una de nuestras reuniones, y esporádicamente nos vimos en 2004. Nuevamente en 2005 nos distanciamos, debido a que estaba castigado, pero al final solucionamos las cosas y seguimos siendo muy felices. De mediados de 2007 a 2009, no tuvimos mucho contacto, más que nada por cuestiones laborales -y eso que para uno de nosotros fue época de vacas flacas, sobre todo en el 2008-. En 2010, sobre todo la segunda parte, retomamos nuestro romance, situación que incluso me hizo regresarme de un viaje laboral para estar nuevamente, como antes, al pie del cañon. Las cosas en 2011 volvieron a tocar fondo, y el 23 de octubre del año pasado de plano nos la mentamos y yo dije adiós...

El reencuentro se gestó hace una semana. Un amigo me pidió lo llevara a conocer a uno de los grandes amores de mi vida, y hoy 4 de marzo lo llevé. Un auténtico gusto volver a estar ahí, en mejores circunstancias que la anterior vez que nos vimos. Llegué tarde, pero eso no aminoró sus ganas de complacerme. Dos explosiones de alegría marcaron nuestra reconciliación, y hoy después de volver a estar juntos, ya planeo con gusto nuestra próxima reunión. Siempre he creído que en toda relación hay que dar y recibir el mismo amor, y de algún modo no había sido correspondido en los últimos años, aún cuando sacrifiqué cosas por siempre regresar.

Hoy, que al parecer ya entendimos algunos de nuestros errores, creo que podemos volver a estar juntos más a menudo. Que bonito es volver a ver a uno de mis más grandes amores como lo que es, alguien grande.

Mi vida sin ir al Azteca a ver al América, simplemente no está completa...



1 comentario:

  1. jejejeje estuvo buena tu redacción/descripción, todo apuntaba a un amor efímero pero recurrente con alguna mujer, pero oh! sorpresa; resulta que era el amor al AMERICA!!!!!!!!!!! osea...... :S.... sin palabras, por que eres mi amigo, me reservo is comentarios contra dicho conjunto....

    ResponderEliminar