La caída de un mito

Desde hace unos meses, los que somos aficionados al deporte(y los que no también), hemos sido testigos en distintos foros de los testimonios que incriminan a Lance Armstrong con asuntos de dopaje. El día lunes le fueron quitados sus 7 títulos del Tour de Francia y en general, muchos lo han ya crucificado y exigen una justicia que se tardó muchos años en llegar, y no de la manera que debía de haber llegado(con un control de doping positivo).

Personalmente, yo le sigo creyendo a Lance. Se me hace increíble que le pudiera ver la cara de idiota a todo mundo durante TANTO tiempo. Además, el simple hecho de ser acusado por puro chango que nunca ganó nada, incrementa mi teoría de la "cacería de brujas", como el mismo Lance la ha llamado.

Uno de los tipos que lo acusa, Floyd Landis, fue entrevistado por este servidor en 2009. El ex ciclista acusó a Lance de las prácticas ya tan conocidas por todos tras haber sido despojado de su título en el Tour de France 2006, justamente por doping. Tratando de restablecer su carrera después de dos años suspendido, vino a México como la figura a seguir en la Vuelta Ciclista México 2009 junto a Tyler Hamilton (otro de los que acusa a Armstrong). Los resultados de este par fueron de risa, finalizando abajo de los primeros 20, pero sobre todo, la actitud de Landis después de las carreras dejaban mucho que desear. Todos los ciclistas, menos él, comían a sus horas y estaban concentrados en la carrera, mientras a Landis te lo encontrabas en el bar echándose un whisky o una chela, en todas las ciudades que visitó la Vuelta. No es que juzgue al muchacho por echarse sus tragos, pero ¿En plena competencia? Digo, nosotros hemos ido crudos a jugar, pero al tío le pagan por hacer eso.

Cuando lo suspenden de por vida al guey por dar su segundo doping positivo, organiza una campaña para apelar, pidiendo dinero a contribuyentes que creyeran en su inocencia. Cuando vio que de plano no iba a ganar nada, desistió de pelear y ahora tiene que regresar la lana que le donaron, si no, va a parar a la cárcel. Acostumbrado a sospechar, ¿no será que "vendió" su testimonio en contra de Lance para salvarse del bote?

Nada más por la actitud del guey y por el historial que trae, la neta le sigo creyendo a Armstrong. Si sus más acérrimos rivales como Alberto Contador(con el cual tuvo un pleitazo cuando fueron compañeros) lo defienden, creo que aún puede limpiar el nombre que ha construido. Además, el ciclismo trae un desmadre desde mucho antes de que apareciera el texano, por lo que sí, yo aún le creo a Lance Armstrong.

Igual y es ciega mi fe en un tipo que siempre se estableció como una inspiración para los enfermos de cáncer, pero si le hemos pedido a los fans del Peje(por citar un ejemplo) que sus pruebas sean contundentes, creo que lo menos que se puede esperar es que haya evidencia más clara de lo que se acusa a un auténtico ídolo de masas.