Después de años criticando a los que asistían y se emocionaban por este tipo de eventos, finalmente caí en sus garras. Después de ir a un programa de radio a hablar del mismo -cosa que sigo sin entender, pues en mi vida me había parado ahí como para comentarlo- me aplicaron la de Don Corleone (es decir, me hicieron una oferta que no pude rechazar) y ahí andaba yo organizando el precopeo y el coche sardina. Dos escalas previas, llegamos al Foro Sol con toda la actitud para sortear el tráfico para ingresar al parking, donde tuve que negociar agresivamente mi entrada a la fila -la neta me colé, pero no por gandul, sino porque era inmensamente larga y no supe ni donde empezaba cuando ya estaba en medio-. La caminata se hizo eterna, y es que el precopeo empezaba a hacer estragos.
Ya adentro, la minuta indicaba conseguir chelas. Se procedió sin miramiento y de ahí al escenario principal. La idea era llegar temprano, pero ir con mujeres varias siempre complica ese tipo de planes -acéptenlo, saben que digo la verdad-. Llegando entre 3:30-4, la primer banda que valía la pena ver era nada menos que la liderada por Alex Lora...El Tri.
EL TRI
"Ora que si quieren cantar, canten y si no...me vale V...a!" |
FOBIA
Le hubieras echado más ganitas, mi Leo |
Después de El Tri -y siguiendo el plan- tocaba ver a Fobia. Anunciaban invitados en su presentación, por lo que pintaba para ponerse bien. No lo fue. Creo que, de las bandas que conocía y que iba a ver, esta fue la que más decepcionó. No fue suficiente que aparecieran con ellos Pato Machete o los de Molotov, el hecho de hacerse los sabrosos y no tocar lo mundialmente conocido, hizo que para mi no valiera tanto su toquín. "Hipnotízame", "Revolución sin Manos" y "Veneno Vil", lo más rescatable del momento. No terminamos de verlos, porque vino el momento de moverse a presenciar lo que, para mi, fue el suceso de la noche...
LOS ÁNGELES AZULES
Los ganones del evento...y Jay |
Llamaba la atención sobremanera su presencia, tomando en cuenta que la esencia del festival es meramente rockera -aunque bueno, en los carteles promovían más a Los Yeah Yeahs o a Morrissey y tienen de latino lo que yo de australiano-. Un setlist corto, pero sustancioso. Sobraba la presencia de Ximena Sariñana(particularmente no soporto como canta, siento que alguien está matando un borrego), y nos pudieron regalar un par de rolas más de su vasta discografía. Ahí, las chelas ya habían hecho mella en nosotros, pero eso no impidió que los 40 mil contados en esa presentación cantáramos a todo pulmón y persignáramos el piso al ritmo de temas como "Entrega de Amor", "17 Años" y "Como te voy a olvidar"-que cantaron dos veces-. Ya con esa tocada, el Vive valió la pena. Después, reposamos un poco en ese mismo escenario -mientras otros veían a Dread Mar I-, para dirigirnos al considerado plato fuerte de la noche.
TAME IMPALA
Gracias a este guey, ya andábamos pidiendo las entradas... |
BLUR
Blur...el platillo principal. |
CONCLUSIONES
Sin duda, me quité muchos estereotipos. La verdad si vas en plan de pasártela chido, no importa que la mayoría de los presentes nada más vaya a empedar o a pegarle al pasto. Hay bandas que merecerían más tiempo, otras merecen otros foros -sigo sin entender porque mandaron al otro a Los Ángeles Azules- y otras de plano, deberían replantear lo que ofrecen a su público. ¿Volvería a asistir? Si, pero en este caso, las bandas tendrían que ser mejores y la compañía mejor. Ese segundo punto, sin duda, sería muy difícil de superar. Ya veremos si el año que entra ahí andamos.