martes, 25 de junio de 2013

Abstemio

Se aceptan donaciones para conseguir
esta playera...

Una vez puesto en marcha el plan de los 180 días - mismo que pueden encontrar de este lado- se han presentado ciertas tentaciones en las que, excuso decir, no hemos caído. Detalles van y vienen sobre el porqué de mi decisión, bromas sobre si lo que sigue es volverme vegetariano o consumiré solo alimentos libres de gluten, o si de plano mi hombría ha quedado en el olvido y ahora aletearé como aquella canción de Pandora "Como Una Mariposa". Respondo veloz: No, no me volveré vegetariano, mucho menos consumiré alimentos libres de gluten (a todo esto, ¿Qué es el gluten?) y solo para que quede claro, en este blog solo se siguen indicaciones de Axl Rose(y muy a veces de Freddie Mercury), por lo que no cantaremos rolas de Pandora ni simularemos ser colibríes como Apu.

Dentro de toda esta vorágine de información, algo hemos aprendido. Por lo menos el viernes anterior, en el que varios de mis amados cofrades se pusieron harto chachalacos, por fin pude entender lo valioso que es ese ser que se sublima en los momentos de peda de todo el contingente. Ese que se abstiene de beber para ir por las chelas a las 3 antes meridiano, el que gobierna a los que se ponen necios con el celular ("déjenme hablarle a mi ex para decirle que la amo, carajo!", y otras joyas) y el que pone el auto para llevar a los que acaban -o acabamos, como era mi costumbre- con el florero sirviendo de gorro. Ese héroe anónimo conocido como....EL CONDUCTOR DESIGNADO.

Antes crítico de los que ponían cara de caballo cuando se les ofrecía un trago y no podían -o no querían- chupar, hoy me percato de su utilidad y sobre todo, de la valentía que requiere aventarse un papelito de esos. Me vienen a la mente distintos personajes a través de los años que se han aventado el paquete de no beber con tal de llevar sanos y salvos a sus compinches, y muchas veces, se tienen que soplar la guácara del de junto para ni las gracias llevarse en la mayor parte de las ocasiones. Los damos por sentados, pues.

No con esto me estoy poniendo en un escalón superior por lo acontecido el viernes, sino simplemente reconozco que están MUY cabrones. Miren que aguantar a una sarta de vikingos chupando cual magios en Los Simpson si requiere de paciencia, muchas ganas de ver a su gente y sobre todo, estar dispuestos a la humillación popular. Este último punto es crucial, pues hemos hablado de las bromas a las que hemos sido sometidos. Vaya, el bullying por no beber.



La verdad, no me arrepiento. Creo que algo tengo que aprender con este pequeño reto. Seguiremos informando como se pasan los meses, pero la primera prueba al menos fue superada.

PD. Si usted necesita quien le lleve su nave, con una módica suma podemos iniciar a negociar su servicio VIPito de chofer. Informes ya saben donde...

No hay comentarios:

Publicar un comentario