martes, 17 de marzo de 2015

Coherencia

Tiene exactamente un mes desde la última vez que me paré por aquí. Muy mal, pues la idea era seguir escribiendo por lo menos este año hasta darle un cierre digno a este amado tiradero de cagada. En fin, en lugar de escribir porque no me digné a escribir, procederé a escribir (jaja).

Últimamente, y no me refiero a los últimos días, me he topado con ciertas disyuntivas en las cuales ha tenido que entrar el criterio. Si, ese que normalmente no sale a colación, dejando al impulso hacer destrozos. Bueno, pues finalmente, llegué a la conclusión sencilla de que me URGE recuperar coherencia. Lo decía mucho en mis círculos cercanos y de repente se me perdió el hilo. Lejos de ser algo para los demás, es algo que a mi me hace estar mas tranquilo. He aquí algunos ejemplos en los que no estaba aplicando coherencia.

- Me cuesta trabajo levantarme los sábados a trabajar, por lo que era una maravillosa idea ponerme hasta el moco el viernes, para que me costara AÚN MÁS trabajo la levantada.

-Estoy bajo un régimen alimenticio, y entre más se acerca uno a la meta, pues más se tarda uno en bajar. Uno quiere bajar de peso, pero le mete a los sopes, tacos y pizza solo (no, no es que me haya comido seis pedazos de pizza yo solo...bueno si).

-Desde tiempo inmemorial he tenido problemas de sueño. Por más cansado, madreado o desvelado que me encuentre, me cuesta trabajo conciliar el sueño. Intentamos todo tipo de remedios -menos pastillas- y así como uno puede conciliar el sueño en las noches tranquilas, hay días en que por más respiraciones metódicas nada más no se pude. Bueno, pues con esa condición conocida por mi, decido echarme dos cocas antes de jetear. Idea millonaria -para Coca Cola, claro-.

-Todos los que leen este tiradero saben que ahora corro como actividad deportiva principal. La meta este año, después de pensarlo bien, son dos medios maratones. Para el primero ya estoy inscrito, y para el segundo estamos viendo si lo hacemos en el extranjero o en el lugar donde todo comenzó el año pasado: Acapulco. Bueno, para prepararlos, de repente me da por NO ENTRENAR. Es la manera perfecta de dar pena y que te lleve el carrito de la vergüenza.

Como estos, muchos ejemplos más. Para mejorar, creo que uno debe mostrar un poco más de coherencia, entre lo que dice y lo que hace. Al menos ya identifiqué que me tengo que disciplinar -o gobernar- un poco más. Si, ya sé, ingobernable desde tiempo inmemorial, a ver si en lugar de los demás yo lo puedo hacer.

En fin, hay que trabajar más en ello. Seguir escribiendo ayuda a sacar un poco de frustración, y hoy antes de dormir para correr mañana y no volver a ser un gordo lleno de vigor, dejamos esta rolita, bastante adecuada para entender que siempre, hagas lo que hagas, recibirás lo que das. O bueno no, pero hay que trabajar acorde a los deseos de cada quien.

1 comentario:

  1. [C]reo que tienes muchas
    [O]tras actividades que
    [H]acen que no vayas acorde a
    [E]l plan que te has trasado y de
    [R]epente se presta y uno se da
    [E]l gusto de dejarlo a un lado
    [N]o te has dado por vencido y
    [C]ontinuas escribiendo y corriendo
    [I]gual no tal como te lo has propuesto
    [A]si que animno!! y saludos.

    ResponderEliminar