The record shows, I took the Blows

Dedicado a los que me aguantaron por nueve meses...

En febrero, después de salir de la editorial, pronto me llegó la oportunidad de seguir trabajando. Lo consideré un enorme golpe de suerte, ya que después de estar un año sin trabajo, quedarme sin actividades me daba miedo. No tardé ni una semana en encontrar, por lo cuál me consideré eternamente agradecido.

Cuando llegué al área me encontré un ambiente dividido, en particular, porque la persona al mando no quería que conspiráramos en contra de ella. No caí con el pie derecho ya que le quité a una persona su lugar, por lo que me odió un rato....creo que después se le quitó.

Conforme pasó el tiempo, me fue gustando lo que hacía, pero me llamaba mucho la atención que hubiera tantos cambios de integrantes. De febrero que entré al día de hoy han habido al menos 15 salidas...me parece poco normal dado que no hay una continuidad. En fin, teniendo que lidiar con un "Gato", con un tipo que no hablaba de frente, con una jefa que más bien parecía jefe, y dos o tres compañeros amables, llegaron los cuatro meses....y después un golpe fulminante.

La partida de uno de nosotros fue un shock para mí. Un día antes de que muriera habíamos echado desmadre como pocas veces...fue igualmente shockeante verlo en su ataúd...y fue aun más impactante enterarte que hubo personas que lloraron por compromiso...

Entre irnos o no se fue pasando el tiempo, siguieron pasando personajes a formar parte de esa galería....desde un tipo que cantaba cumbias añejas hasta un auténtico Diablo...un cómplice de buena onda. Se formó un grupo genial, ya que nuestras personalidades encajaban al mil entre todos...

Llegó septiembre y la gran oportunidad. Aunque no duró mucho, dejamos huella por el gran trabajo que hicimos. En ese momento el equipo era lo más importante. No había egos, no había el "yo mando"....todo era un fin común. Cada quien era una pieza que engranaba a la perfección...desafortunadamente, los de arriba no pensaron lo mismo.

Llegó octubre y con el, el principio del fin. Hubo indicios de que así sería, disfrazados de una tranquilidad que no existía. "Diablo" lo pronosticó...."no tarda en sacar el cobre", y así fue.  Cuando todo proceso estaba autorizado, ella tenía que destrozarlo para formar parte del mismo. Un control insano sobre las actividades de cada uno, empezando con juntas que asemejaban a nuestras madres que nos supervisaban para hacer la tarea....

Las circunstancias de mi salida no son tema aquí...ya que todo indica que nunca pertenecí al nuevo "equipo". El único objetivo de esto es agradecer a todos los que formaron parte de esta historia. Desde la persona que me contrató, el gato que me iba a destruir, el amigo que se fue, el puchungo, la entenada, el diablo, el dibujo animado, capitán tocino, la que yo integré y la que intentará tomar mi lugar...todos ellos y los que faltaron de nombrar fueron importantísimos, y son por los que me duele decir que ya no tengo trabajo. Ellos hacían la diferencia, ellos hicieron que valiera la pena.

Si, yo quería salir...me fue mejor, también lo acepto. Como decía Sinatra en My Way, "The record shows, I took the blows". Nunca fue tan cierta esa frase...la recordaré siempre porque al final, parece que todo el plan se hizo a mi manera...ojalá lo que viene también lo sea.